jueves, septiembre 11, 2008

La tensión con Occidente puede acelerar la venta de misiles rusos a Irán

A EE. UU. podría salirle el tiro por la culata

La tensión con Occidente puede acelerar la venta de misiles rusos a Irán

Después de haber estado haciendo lo posible y lo imposible para reforzar su presencia en la región, y en particular para impedir el fortalecimiento militar de Irán, podría ser que las acciones emprendidas contra Rusia a raíz del conflicto con Georgia acabaran pasándole una desagradable factura a Estados Unidos. Rusia se aprestaría a suministrar a Irán misiles antiaéreos de la última generación.

Ángel Maestro

12 de septiembre de 2008

El deterioro de las relaciones entre Occidente y Rusia podría empujar a esta última a suministrar misiles antiaéreos de ultima generación, S-300, a Irán, según declaró Ruslán Pújov, director del Centro ruso para el análisis de estrategias y tecnologías.

Las primeras noticias acerca de dicho suministro aparecieron en la prensa internacional a comienzos de 2006, pero el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso y la corporación exportadora de armas Rosoboronexport nunca llegaron a confirmar la existencia de un acuerdo a este respecto. Este comentarista también recibió en su tiempo la misma respuesta por parte de la embajada rusa en España.

Hoy no cabe descartar que Moscú haya enviado a Irán algunos componentes para tales sistemas, aunque los misiles en sí no hayan llegado a la antigua Persia.

Los misiles S-300 tienen un alcance de entre 150 y 200 kilómetros, pudiendo, además de aviones, abatir proyectiles crucero que vuelen a una altura de 6 a 100 metros. Disponen asimismo de una elevada acción antiperturbadora, siendo capaces de de destruir varios blancos al mismo tiempo.

Teherán necesita urgentemente esos misiles antiaéreos para hacer frente a las amenazas de Estados Unidos e Israel de atacar sus instalaciones nucleares. Teniendo en cuenta los sistemas Tor-M1, suministrados anteriormente por Rusia, Irán podría establecer una fuerte barrera defensiva con los cohetes de mediano y largo alcance.

El contrato ruso-iraní de los S-300 podría acelerarse a la luz de la agresividad estadounidense, puesta de manifiesto en su deseo de integrar lo antes posible a Ucrania y Georgia en la OTAN. En el tema georgiano Washington dio carta blanca al presidente de dicho país para actuar a su libre albedrío, lo que ha originado las trágicas y conocidas consecuencias.

La implantación del escudo antimisiles en Polonia y Chequia, así como los acontecimientos de Osetia del Sur están deteriorando las relaciones de Rusia con los Estados Unidos en particular y con Occidente en general, aunque tanto el presidente Medvédev como el primer ministro Putin han realizado declaraciones en contra de todo histerismo. Sin embargo, fuentes rusas señalan su asombro ante las reacciones occidentales derivadas de las ventas de armas rusas a Siria o a Venezuela.

Hasta ahora Rusia bloqueaba las peticiones iraníes de armamento avanzado, situación que puede cambiar próximamente dado el deterioro de relaciones con los EE. UU.


http://www.elmanifiesto.com/articulos.asp?idarticulo=2706

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