jueves, septiembre 25, 2008

Frente a la crisis, liderazgo

Frente a la crisis, liderazgo

Viernes, 26-09-08
SI la serenidad es la mejor cualidad de los gobernantes en tiempos de crisis, la decisión de suspender la campaña electoral anunciada por el senador John McCain tal vez no sea la mejor expresión de responsabilidad en el liderazgo. Tan malo es fingir que se ignora que la economía atraviesa momentos delicados como enviar mensajes exageradamente catastrofistas a los ciudadanos, bastante preocupados ya por sus ahorros y su puesto de trabajo. El todavía presidente norteamericano ha propuesto un ambicioso y multimillonario plan de rescate que los principales operadores han recibido con satisfacción y que ayer fue respaldado por demócratas y republicanos en el Senado, que escenificaron un gesto de unidad ante lo que consideran una seria amenaza para las estructuras de su país. En esta situación, los dos candidatos a la Casa Blanca deben decir con toda claridad cuál es su opinión sobre lo que ha sucedido y cuáles son sus planes para salir de este atolladero en caso de ser elegidos en noviembre. Los debates entre Obama y McCain, aún pendientes, serán especialmente ilustrativos para los electores, que tendrán la oportunidad de saber de primera mano cuáles son las recetas que ofrece cada uno de los aspirantes a la presidencia para hacer frente al problema. Es la hora de las ideas, no de un silencio que parece derivado del miedo.
En este sentido, se ha acusado al presidente Bush de haber apostado por atemorizar a los ciudadanos en su último discurso para tratar de movilizar los apoyos que necesita su plan en el Congreso, aunque en este caso al actual inquilino de la Casa Blanca no se le puede acusar de estar haciendo un uso electoral, porque es obvio que no se presenta a la reelección y, en todo caso, cargar demasiado las tintas perjudicaría más al candidato republicano que a su rival demócrata. La crisis financiera es real y lo más razonable es tratar de superarla con todos los medios disponibles para minimizar sus efectos. Los mismos expertos que alertan sobre lo incierto de la situación actual reconocen también que estamos todavía a tiempo de tomar medidas que pueden paliar los efectos devastadores que han tenido anteriores descalabros financieros de dimensiones globales. Para ello hay que realizar un diagnóstico realista y disponer de un margen de maniobra holgado, muy necesario para esperar con cierta calma a que la situación mejore, exactamente los dos errores que se le pueden reprochar al presidente del Gobierno, cuya descripción caricaturesca de la economía española como un bólido que acaba de rebasar a Italia y que le pisa los talones a Francia no tiene nada que ver con lo que están sintiendo ya los ciudadanos. A Rodríguez Zapatero se le ha terminado en cuestión de semanas el superávit presupuestario, pero transmite la impresión de que todavía no se ha dado por enterado.
Lo que no resulta razonable es afirmar que en esta crisis ha muerto -o que debería «suspenderse»- el capitalismo, puesto que se está buscando la solución a la crisis en la gestión del sector público. Para comprobar lo que sucede cuando no hay libre mercado no hay más que mirar a Cuba o Corea del Norte, y no magnificar una intervención excepcional que pretende precisamente salvar el sistema. Tal vez lo que sí debería sucumbir en esta crisis es un cierto tipo de ingeniería financiera, basada esencialmente en la especulación compulsiva, que está claramente en el origen de parte de las dificultades que afloran en estos momentos. Resulta evidente la necesidad de nuevos y mejores organismos reguladores que respondan a los mecanismos económicos que han aparecido con la era de la globalización. En todo caso, también sería un error considerar esta crisis como un desastre natural, porque no lo es: por complejo que pueda llegar a ser este fenómeno, es necesario que las autoridades aclaren las responsabilidades y señalen a los culpables, sobre todo si al final los platos rotos los tienen que pagar los contribuyentes.

http://www.abc.es/20080926/opinion-editorial/frente-crisis-liderazgo-20080926.html

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