Rosa Regás, ¿La ultima estalinista?

martes 21 de agosto de 2007
Rosa Regás, ¿la última estalinista?
La directora de la Biblioteca Nacional, Rosa Regás, ha vuelto a salir con sus pamplinas tendenciosas. Escribe, ahora, a favor del «gorila rojo» y nos vende los méritos del presidente venezolano. ¿Se acuerda la garante de los tesoros de las letras castellanas del mazazo de Chávez a la libertad de expresión? Nada nuevo bajo el sol: muy propio de estos progres trasnochados. Rosa Regás está permanentemente concernida por el compromiso. Es el término que la izquierda usa para referirse a su sectarismo y su odio hacia las sociedades abiertas y plurales. La directoria de la Biblioteca Nacional representa perfectamente la concepción sectaria que destila la izquierda en España.
Rosa Regás une a su condición de escritora una militancia política extremista, sectaria y pasada de moda. Esta señora está anclada en los años treinta, con ese azuzado sentido «guerracivilista» que impregna sus acciones. Lo malo es que lo hace con dinero público, es decir, de todos.
Rosa Regás debe de ser «la última estalinista», porque sus comportamientos suenan autoritarios, despilfarradores e intolerables. Y es que la institución que teóricamente dirige tuvo que pedir una ampliación del crédito y en seis meses se ha «fumado» el presupuesto de todo el ejercicio. Ha externalizado los servicios y ha hecho adjudicaciones directas. En seis meses se ha gastado casi millón y medio de euros para glorificar la II República y su particular visión de la Guerra Civil.Desde el Ministerio de Cultura se le llamó la atención ante los elevados gastos que presentaba y por los suntuosos viajes.
Manuel Férriz Martínez. Sevilla