Jorge Vilches ¿Que UPN vamos a ver?

viernes 10 de agosto de 2007
Navarra
¿Qué UPN vamos a ver?
Si la alternativa a un tripartito socialvasquista en Navarra es más vasquismo, es preferible dejar el Gobierno a Chivite y Zabaleta o convocar elecciones ya.
Jorge Vilches

El discurso de investidura de Miguel Sanz nos ha dejado una doble amenaza sobre los navarros: la moción de censura y las elecciones anticipadas. Y son opciones excluyentes; es decir, presentada la moción no cabe la posibilidad de disolución del Parlamento, y viceversa, convocadas las elecciones no se puede presentar la censura.
El Gobierno de Sanz vivirá, seguro, al menos hasta las elecciones de marzo de 2008. La anticipación de los comicios no sería bien vista por una ciudadanía navarra que ansía sosiego, por lo que podría tener repercusiones negativas. Ni siquiera le interesa a UPN convocarlas en plena crisis del PSN, cuando hipotéticamente podría sacarle más distancia.
La moción de censura que PSN, NaBAi y IUN barruntan para la primavera próxima tampoco les conviene a los socialistas, como ha visto el equipo de Blanco en Ferraz. La imagen sería también negativa para el PSOE si, para justificar la moción, obstaculizan la acción del Gobierno Sanz abrazándose a los anexionistas e independentistas de NaBai. Esto daría argumentos y votos al PP.
Pero detrás de los cálculos electorales está la gran cuestión: qué UPN va a salir de esta investidura. El Gobierno de Sanz tiene dos posibilidades para mejorar su situación: reforzar su constitucionalismo, presentándose como más españolista a fuer de navarrista; o bien, hacerle guiños al vasquismo para restarle votos a sus adversarios y conseguir un hipotético consenso entre las fuerzas políticas. La primera opción fue la línea exitosa de Alejo Vidal Quadras, que hoy quiere resucitar Daniel Sirera. La segunda fue la que siguió Piqué en Cataluña, con evidente fracaso en esta región y, por su repercusión, en el resto de España.
Y escuchando a Miguel Sanz, surgen las dudas. ¿Qué programa puede ser "abierto y posibilista", como ha dicho, dentro del Amejoramiento y la Constitución? Es propio de una democracia el que un Gobierno actúe dentro de la ley, y que presente un plan con objetivos económicos y sociales. Pero la situación de Navarra requiere de un discurso que aborde no sólo la gestión de lo público, sino lo ideológico y emotivo. Porque el plan de PSN, NaBai y IUN no consistía en construir más kilómetros de carretera y poner ordenadores en todas las aulas, sino transformar el marco jurídico, político, identitario e incluso sentimental de Navarra. No basta, en estas circunstancias, decir, como ha hecho Sanz, que "crear un ente común con el País Vasco es algo ficticio", que "no genera ningún beneficio" y que no ha habido más unión institucional en la historia que la española. Para convencer y mostrar fortaleza hay que explicar por qué.En definitiva, amenazar desde el poder al adversario con unas elecciones anticipadas no es una solución, es preciso tener y manifestar principios claros y contundentes, tanto como visión de Estado y de futuro. Si la alternativa a un tripartito socialvasquista en Navarra es más vasquismo, es preferible dejar el Gobierno a Chivite y Zabaleta o convocar elecciones ya.