Florentino Portero Alianza de democracias

martes 21 de agosto de 2007
Alianza de democracias
POR FLORENTINO PORTERO
El pasado viernes tuvimos la oportunidad de leer en las páginas de ABC un importante artículo de Robert Kagan, versión reducida de otro de dimensiones mucho mayores y marcado carácter académico publicado en Policy Review, la revista de la Hoover Institution. Kagan se dio a conocer en España y en todo el mundo con un best-seller titulado «Poder y debilidad» que fue objeto de intensa polémica en los noventa. Desde entonces ha sido un referente permanente en el debate sobre seguridad internacional.
A menudo el árbol del día a día no nos deja ver el bosque de la realidad en la que vivimos. De ahí la oportunidad de publicar el texto de Kagan, cuyo objetivo no es otro que establecer las coordenadas fundamentales del entorno estratégico actual. No oculto mi coincidencia con sus análisis, entre otras cosas porque somos muchos los que venimos apuntando conclusiones semejantes. Fundaciones como FAES han publicado informes en la misma línea: las diferencias de intereses y valores con China y Rusia y la coincidencia con Estados Unidos aconsejan una reinvención del vínculo atlántico acorde con los nuevos tiempos, incorporando a las democracias de otras regiones del planeta. La línea editorial de este periódico ha subrayado las diferencias con Rusia por su política energética, de derechos humanos, retroceso democrático, o de defensa; con China por su política exterior y de derechos humanos; así como la necesidad de reforzar los lazos con las naciones democráticas.
No se trata de reabrir tensiones propias de la Guerra Fría. Rusia y China no son enemigos, pero tampoco son aliados. No nos engañemos. Con ellos no podremos contar para resolver los grandes retos que tenemos ante nosotros. Si en un momento dado se les puede incorporar, bienvenido sea, pero no será la norma. Por el contrario, con naciones como Japón, Australia, Israel... compartimos valores e intereses y necesitamos -ellos y nosotros- estrechar relaciones y coordinar políticas.
En una sociedad global hay que actuar globalmente y la democracia es nuestra seña de identidad.