Esperanza y Pedrojota vociferan, ¡Rindete Alberto, estas rodeado...!

Esperanza y Pedrojota vociferan: "¡Ríndete Alberto, estás rodeado...!"
Miguel Ángel Orellana

El malestar -profundo en unos, atemperado en otros, contenido hasta ahora- entre los ´aguirristas´ contra las ambiciones del alcalde ha levantado la liebre. Una papeleta para Rajoy.

28 de agosto de 2007. Tensas vísperas de un curso político cargado de incógnitas y datos a la contra del PP. Apenas falta medio año para las elecciones generales y en las filas del centro-derecha resurgen viejas aspiraciones para afrontar el último tramo antes de la cita definitiva, pero que en realidad presuponen maniobras para situarse en posición de salida de cara a la posible sucesión del actual líder, Mariano Rajoy, si no logra la victoria frente al hoy jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero. Corrillos a tope. Se habla de Alberto Ruiz-Gallardón y su insistente deseo de ir en la lista del Partido Popular por Madrid en la próxima primavera. La demanda del alcalde de la capital de España cayó como un jarro de agua fría en la vieja guardia del partido, al igual que la que lanzó al día siguiente de las elecciones municipales y autonómicas del 27-M. Ángel Acebes, Eduardo Zaplana o Esperanza Aguirre le leyeron la cartilla con acritud o ironía al regidor a las pocas horas de conocerse su reiterada exigencia. Quien avisa, no es traidorCon el liderazgo de Rajoy puesto continuamente en solfa, el colmo del desmadre llegó el pasado viernes cuando el diario El Mundo abrió su edición con una carta del edil Ángel Garrido, que además es secretario de distritos del PP en Madrid, que servía de "recordatorio" de normas de funcionamiento que garantizan la democracia interna en el seno del grupo municipal. La misiva fue interpretada al instante como un golpe directo de los concejales "aguirristas" -12 de un total de 34- al mentón del alcalde y anticipa de cara a septiembre una serie de exigencias de estos ediles a Ruiz-Gallardón. En la carta, entre un fárrago de alusiones al reglamento del grupo municipal, quedaban claras, por lo menos, dos quejas y una advertencia. A saber: 1) Los concejales del Partido Popular, incluido el alcalde, deben reunirse al menos una vez al mes, cosa que no han hecho en los últimos 4 años. En este período sólo se registraron 5 encuentros. 2) Las juntas de distrito perdieron en la pasada legislatura competencias que atesoraban con el otrora regidor, José María Álvarez del Manzano, maltratado, por cierto, en el último tramo de su gestión por el hombre obligado justamente a todo lo contrario: José María Aznar López. En cuanto a la advertencia que lanzaba Garrido en nombre de los concejales cercanos a la presidenta de la Comunidad de Madrid, consistió en recordar que el reglamento -un aviso para navegantes- faculta a una quinta parte de los ediles para convocar reunión del grupo municipal sin contar con el alcalde. El favor de PedrojotaEn ocasiones, las cosas son como son y además como parecen. De modo que ya está en marcha la operación a la que tanta gente desde el centro-derecha democrático se negaba a dar pábulo: la consistente en proclamar a Gallardón y su inveterada deriva progre en enemigos públicos número uno del PP. Ese es el favor que Pedrojota Ramírez está dispuesto a hacer a Aguirre. Lo saben hasta las piedras. Es demasiado grueso el calibre de la pedrada como para no verlo. Si no, ¿a qué viene tomarse tantas molestias? Más claro, agua. Los encendidos ataques ante un eventual desembarco de Gallardón en el tingladillo electoral de Rajoy irán in crecendo en los próximos meses. "El buitre de Alberto se va a enterar de lo que vale un peine". La frase corresponde a un notorio personaje del Gobierno regional. La vuelta atrás se adivina imposible. Comprobarlo está al alcance de quien se atreva a escrutar entre la tropa "aguirrista". Las maniobras previstas para los próximos meses aspiran dejar noqueado a un confiado Gallardón y a su parroquia mediática, la encarnada por Vocento-PRISA. Los sueños del alcalde de Madrid pueden desinflarse hasta quedar en agua, azucarillos y aguardiente. La intervención del tándem El Mundo-COPE resultará un ingrediente devastador. De modo que sólo falta cuarto de hora para que Aguirre y Pedrojota se planten en plena Casa de la Villa y, altavoz en mano, le hielen la tímida sonrisa de Gallardón con un concluyente: "¡Ríndete, Alberto, estás rodeado...!". Un misil en plena línea de flotación de RajoyComo en el famoso chiste de los vascos que salen al monte, o estamos a Rolex o a setas. Y es que lo peor que le puede pasar al centro-derecha, en este momento, es caer en la trampa de la división y el cainismo. La historia está ahí para recordar que esa fue la tumba de UCD y la puerta a trece años de gobierno socialista. En las filas populares hay cierta sensación de desasosiego por la contundencia de los mensajes que ´El Mundo´ está vendiendo a sus lectores. Y es que, ciertamente, la caída de Ruiz-Gallardón puede ser una apuesta temeraria de la que Rajoy podría llegar a arrepentirse. Y eso hace la jugada especialmente arriesgada también para Aguirre cuando, en las filas del propio PP, son muchos los convencidos de que la guerra por el testamento del gallego forma parte de la elaboración de las listas o, dicho de otra forma, la solución que se le de al embrollo marcará el perfil de un hipotético sucesor de Rajoy. Y si la marea no se para en Gallardón --el espectáculo rebasa con mucho la normal e incluso sana discrepancia entre conmilitones-- es evidente que las aguas ascenderán escaleras arriba. A Rajoy le van a llegar al cuello. ¿Cui prodest? Evidentemente, Aguirre que ha demostrado tener tanto o más tirón que Ruiz-Gallardón el pasado 27-M y que cuenta con importantes respaldos dentro de su partido. Pero hay más. Acebes y Zaplana y el resto de la vieja guardia, todos ellos capaces de asegurar a la derecha 130 diputados fijos y de garantizar muchos años de oposición, porque con Acebes o Zaplana como primerísimos rostros, o alguien parecido, el Partido Popular jamás volverá a gobernar en este país. "Somos conscientes de cual es la estrategia y estamos sobre aviso", dicen en el entorno de Rajoy. Pues eso. A Rolex o a setas.